sábado, 7 de diciembre de 2013

El molde de María Elena.


Monumento a María Elena Walsh.
Molde de la medalla retratando a María Elena poco tiempo antes de morir. La forma negativa que se vuelve forma positiva.
El molde produce, bajo cierta iluminación, un efecto de inversión óptico cóncavo a convexo que se potencia por la rápida pátina de las partes más salientes del molde que se vuelven las más entrantes por efecto óptico. En persona el efecto funciona, pero cerrando un ojo funciona más y es por eso que la cámara, cíclope o tuerta, no tiene otro ojo para tratar de revertir la ilusión. En video funciona todavía más porque se ve como el modelado sugiere las distintas posiciones. El seguimiento que la mirada hace, lo hace incluso de arriba hacia abajo y viceversa. Es una forma primaria de anamorfosis.
Esto me ha llevado a imaginar este molde pegado a una baldosa o calado en ella con la forma en negativo, la forma ausente, que varias veces exploramos con mi gran amigo Alberto Cedrón. La forma ausente que se vuelve fantasma presente y nos sigue sonriente mientras pasamos junto a ella, a esa metida de María Elena. Metida dentro del molde, digo y con respeto.
Modelado y moldeado: Alfredo Benavidez Bedoya.