sábado, 15 de marzo de 2014

Pesadillas del Arte Moderno. El Mingitorio o Fuente de Marcel Duchamp en lugar del Monumento a Colón.


Las pesadillas del Arte moderno. “La Fuente o el Mingitorio” de Marcel Duchamp, ocupando el lugar del Monumento al odiado Colón. Acuarela. Lápiz acuarelable. Medidas: 30 cm x 40 cm. Autor: Alfredo Benavidez Bedoya.
Atento al silencio de mis colegas los artistas, los críticos de arte, los funcionarios de Cultura, los curadores, los estudiantes de arte, los intelectuales en general, de todas las ideologías y reparticiones, silencio que les hace jugar un rol de imbéciles, mientras las Asociaciones de Inmigrantes defienden una pieza que, seguramente los nabos que nombré, todos ellos deben pensar que es una obra de mierda de fin de siglo y que no tiene valores culturales. Son todos unos brutos, unos cagones y unos desagradecidos. Primero. Desagradecidos porque todos tienen apellidos de inmigrantes, tanos, gallegos, judíos, polacos, alemanes como los Kirchner, árabes, ingleses y franceses, que le deben a Colón haber descubierto un mundo nuevo para aquellos a los que el mundo viejo, Europa, los echaba a patadas y bajo amenaza de muerte por hambre o en forma violenta o no les permitía llevar adelante sus ideales o concepciones de vida. Les hicieron un lugar al cual llegaron a dirigir rápidamente, donde se practicó el republicanismo a la latinoamericana, como el culo, pero se les hizo un lugar. No creo que haya muchos ni originarios ni criollos antiguos entre los funcionarios actuales, más bien parecen ser los que terminaron dominando todo el territorio y las instituciones. Reemplazaron a los indios originarios, les guste o no. Lo que ahora expresan los tanos indigenistas es una culpa terapéutica, porque ninguno de los inmigrantes europeos está interesado en devolver lo que sus abuelos les quitaron a los indios. Que devuelvan el Calafate primero, después hablamos.
Segundo. Brutos porque desconocen la escultura en general y la de piedra o mármol en particular. Ocurre que el mármol es un formación quebradiza, que tiende naturalmente a rajarse, no se desgrana como el granito, los buenos mármoles ante un golpe suave pierden poca materia y ante un golpe fuerte pierden mucha, esos son los mármoles escultóricos. Los otros son más caprichosos, uno puede golpearlos con el puntero y no quitar casi nada, pero al segundo golpe partir un gran pedazo o escalla. El mármol se parte, se astilla, se raja, al punto que para cortar un bloque bien grande, se talla una línea y en ella se clavan varios cortafierros petisos y se les golpea al mismo tiempo provocando una rajadura controlada. Y por todo lo antedicho cuando se talla una figura los golpes del tallador llenan de pequeñas rajaduras el interior del mármol. No hay que mover en lo posible estructuras de mármol de ese formato. Esto es técnico no ideológico. Omar Estela, supuesto curador de la “idea de desmonumentalizar a Colón”, es incapaz de tallar una figura de la calidad de Zocchi ni de un metro de altura, y si no, googleen Omar Estela esculturas y verán. Tiene buenas obras, oficio también, pero todo mediano formato y ligado al abstracto, la devoción por las materias naturales y eternas y también ligado al conceptual, esencialista, Brancusi, Cícladas, neolítico, Noguchi, precolomboide, la tradición japonesa, formación intelectual pobre y asistemática, influído por Larreta y Michel el marido de Josefina Robirosa. Filósofo Omar no es pero algo de piedra sabe, aunque sea en pequeño formato, que ponga pila y que no se le rompa el Monumento. Dice estar en contra del Monumento en general porque no sabe hacer ninguno y lo critica a Zocchi porque trabajaba por encargo, lo que pasa es que a vos nadie te encarga nada, a todos le encargaban Monumentos, nadie los realizaba por la suya. Miguel Ángel trabajaba por encargo, Rodin también y Yrurtia también. También os indios trabajaban por encargo del Inca o el cacique. ¿Cuánto cobra el Curador que quiere “desmonumentalizar” a Colón para “monumentalizar” a Juana Azurduy? Chantas y chupamedias. Conozco otro chanta que anda en la misma y cuando le tocó modelar un San Martín garpado por el Ministerio de Educación, el pueblo donde iba a ser erigido, lo rechazó. Son todos amigos del Ladrón del Palacio.
¿ Sabían que el autor Zocchi viajó desde Italia para montar el Monumento a Colón?, bueno, ahora lo desmontó Omar Estela, por indicación supongo de la responsable artística, la Lic. Mariel Ciaffardo.
Tercero. Cagones ( o cómplices) porque temen que le pongan amonestaciones por señalar una cagada mayúscula desde el punto de vista técnico, artístico y cultural. Pues yo no creo que lo puedan volver a montar ni siquiera en el mismo lugar. Porque además no hay, lamentablemente hoy en la Argentina, escultores como Correa Morales, Yrurtia, Bigatti, o están viejos ya para emprender estos desafíos. Hay jóvenes muy diestros y formados en la talla, aunque no creo que hayan realizado nada de tal complejidad. Señora Presidenta: el monumento es una pieza de arte de gran belleza y no hay quién la haga en la Argentina, salvo en Carrara. Nosotros la teníamos entera marcando un eje que termina en el Congreso. Este es un episodio ridículo y adolescente. Y además el mejor Monumento que tenemos es el Monumento a Roca en Diagonal Sur, de Zorrilla de San Martín, que también lo quieren voltear por haber matado Roca a los indios, que no hubieran dejado desembarcar en la Patagonia a los Bayer y a los Kirchner. Porqué no le cambian el nombre de Julio Argentino Roca a Néstor Argentino Kirchner y se dejan de joder con la escultura. Están haciendo lo mismo que ahora hacen los rusos con las esculturas de Marx, Lenin, Stalin, algunas de ellas magníficas, incluso estupendas pinturas que son despreciadas. Era lo que hacían también los gorilas con los bustos de Evita y Perón.
La responsable artística, escultórica y estética del desmonte, conservación y montado si es que se hiciere, es la Decana de la Facultad de Bellas Artes Lic. Mariel Ciafardo y el responsable sobre los cálculos y maniobras es el Decano de la Facultad de Ingeniería, ambos de la Universidad de La Plata, la cual firmó un convenio con la Nación para trasladar la pieza.
“Las Facultades de Bellas Artes e Ingeniería serán las encargadas de aportar las sugerencias a fin de cooperar institucionalmente para proceder a la puesta en valor, desmontaje, embalaje, movimiento, traslado y nuevo montaje en el sitio definitivo del monumento al descubridor de América, en la ciudad de Mar del Plata.”
“El presidente de la UNLP, Fernando Tauber, firmó un convenio con ALPA VIAL S.A., la empresa encargada del traslado. En la firma del acuerdo, estuvo acompañado por la decana de Bellas Artes, Mariel Ciafardo y el titular de Ingeniería, Marcos Actis. 19.04.2013 | 15:54”
Diario Digital. Diagonales.com
Esta Decana Ciaffardo es la que me dio “la baja” a mí y a otro Profesor en la Facultad de Bellas Artes de La Plata, con un desorden administrativo que ya voy a divulgar.
¿Cuánto cobraron por el convenio? ¿Cuánto cobró cada uno? El otro Profesor que echó Ciaffardo es un eminente historiador en Historia del Arte Colonial, que además estudió y catalogó todos los monumentos de La Plata y alrededores, además de ir a Francia a conocer las fundiciones que crearon muchas de las obras en hierro decorativas traídas por esos años del Centenario para los paseos públicos.. En vez de echarlo, Ciffardo tendría que haberlo consultado respetuosamente.
“Varias son las figuras que sufrieron daños. Una de las imágenes centrales, la del “genio que señala la tierra lejana”, se encuentra en el suelo, seccionada y en diferentes pedazos. Su torso está en el sector sur de la plaza, mientras que sus rodillas se mantienen en el frente de la obra, al lado de una grúa que se utiliza para mover cada parte que diariamente es retirada. “A la figura del “genio alado”, que la acompañaba en el conjunto escultórico, le desapareció parte de su hombro y también de su cabeza. Los llamados “Titanes del Estudio y del Pensamiento” no corrieron mejor suerte. A uno de ellos ya no se lo reconoce entre los trozos de mármol blanco dispuestos en el piso. El otro perdió parte de sus brazos y de sus manos. Todo esto sucede frente a la efigie de Cristóbal Colón, que reposa al costado de la base, que, desde 1921, solía sostenerlo.” Lehmann.com.ar
Y todo para qué, para poner en su lugar el Monumento a Juana Azurduy. Y van a colocar un adefesio. Sin concurso ni nacional ni internacional, van a colocar un adefesio en primera plana. Lo que están haciendo en la Esma me recuerda a una de mis tres suegras, colérica, iracunda, medio borracha queriéndome cagar a navajazos. No sé a cual, tal vez la segunda, pero bueno, sea la que sea, da para salir cagando de todas formas. Y esa prole chiquitita que se adivina entre sus faldas parecen los enanitos de Blancanieves. Tremendas faldas, seguro muy incómodas para dominar la cabalgadura y encima cargarles esas poderosas nalgas arriba de los Hijos del Pueblo. Pero ¿en qué montaba esta mujer, en globo aeroestático? El señor escultor para aprender a modelar los pliegues de la ropa de Azurduy debería estudiar los pliegues de la ropa de Colón, que están magníficamente modelados, sobretodo los del brazo izquierdo. Y hacia dónde va a dirigir el gesto de puño cerrado y la furia guerrera, hacia la Casa Rosada? O hacia Puerto Madero?. Un adefesio que insulta la memoria de Juana Azurduy y coloca a Bolivia en ridículo. Un adefesio como el que le hicieron al pobre Che Guevara en Rosario, que me recuerda a mi abuela cuando volvía de hacerse la permanente en la peluquería.
Y la Academia de Bellas Artes? Que les pasa a los leones y leonas herbívoros que se pasan años haciendo rosca bajo la gran mesa del Salón y se hacen los boludos cuando bombardean con adefesios. Están con el culo fruncido? O tienen miedo que el Ejecutivo los eche del sector de servicio del Palacio Errázuriz y no les pague los empleados y otras cosas que deberían trasparentar. Y toda la sarta de especialistas, conservadores, funcionarios de Museos, arquitectos abocados al Patrimonio, las historiadoras que tienen como coto de caza el Centenario y se llenan la boca con el ladrón de Schiaffino y los chantas de la Secretaría de Cultura?. Bien gracias en Cariló implantándose pelo. Y de paso les hago recordar, se acuerdan la “La Ballena azul”, hicieron mierda el Correo Central para que la Suprema Arquitecta tuviera su Centro Cultural del Mileno, ¿cómo anda eso?. El Salón de Conciertos al que llamaron “La Ballena azul” existirá? O acaso vamos a terminar con el Correo Central ahuecado y un adefesio en lugar de Colón?. Ojo que tragarse un sapo es una cosa y muy otra tragarse una ballena azul.
Para terminar con Juana Azurduy,¿ no se dieron cuenta que para que ella liberara el continente, antes otro debía haberlo invadido y conquistado? Son partícipes necesarios ambos.
Primera propuesta de reemplazo del odiado Colón.
Reproducir a tamaño descomunal el mingitorio de Marcel Duchamp que él denominó: “Fuente”, esta pieza es clave en la historia del arte moderno y un referente al hablar sobre el arte conceptual. Es todo eso pero además es un orinal urbano y me parece que la oposición, no a este gobierno que se va, la oposición a cualquier gobierno y el ciudadano común podría manifestar su desacuerdo orinando en el monumento, todo el orín del pueblo causaría olores que, aspirados por los conductos negros que se ven en la acuarela explicativa, serían conducidos hasta la Casa Rosada, la cual debería permanecer cerrada, para obligar a los funcionarios a trabajar con el olor a la meada del oponente. En caso de ser un gobierno querido por el pueblo, “la fuente” de Duchamp podría revivir aquello de mojar las patitas en la fuente, previo lavado y desinfectado y luego de agregados, perfumes, aguas de montaña y sales nutritivas. Incluso de noche lo podrían usar los travestis con sus esposos para festicholas.
Segunda propuesta de reemplazo del odiado Colón.
Se podría transformar a Colón en Tupac Amaru, conozco varios talladores, que por supuesto no son ni Estela ni el de Azurduy, que podrían modificar los detalles de Colón dándoles un toque indígena. Por ejemplo: como el Colón tiene material de sobra, aunque sería un horror porque está magníficamente tallado, los zapatos podrían volverse unas finas sandalias para que el indio mostrara sus pies, con el capote y el sobrepelliz tenemos mármol para inventarle algo muy étnico a Tupac o dejarlo casi igual, porque siempre se lo representa al descendiente de los incas con ropas occidentales, incluso con las mismas calzas de Colón. La melena y el gorro cortesano alcanzan para tallarle un sombrerito andino con orejeras, aunque Tupac usaba un sombrero aludo que parecía un mormón. Sería un camino de comunión de las dos culturas, sería sacar afuera el indio que llevamos dentro.
Las proporciones no se pueden cambiar, es sabido que los coyas son más pequeños, este detalle se podría mejorar si elevamos mucho más la estatua, desechando la columna original tallada en un solo bloque. Al mandarlo más arriba el representado se achica consiguiendo la estatura adecuada.
Se le pueden acentuar rasgos indígenas en el estilo de Siqueiros, el cual gracias a la gran idea presidencial, se va a seguir echando polvos en los sótanos de la Casa Rosada con la única obra erótica que hizo, sin nada de política pero presidiendo un Museo de Arte Político espantoso. Con las esculturas que acompañan a Colón se podría hacer otro monumento cuando el próximo capricho lo sugiera.
Señora Presidente, de lo demás no me atrevo a opinar porque debe saber bastante más que yo, pero Usted de Arte no sabe nada y los que la asesoran son por lo menos, pelotudos y pelotudas. Guárdese el Monumento a Juana Azurduy, se parece a Usted, tiene la misma onda, lo podría poner en su lugar en el mundo, al lado del Hotel Cinco Estrellas, en el Cachafate.
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